El hecho de poder instalar nuestro plato de ducha a ras de suelo no siempre es posible cuando únicamente hacemos un cambio de bañera por ducha.
Hay que tener en cuenta que lo que se hace a la hora de realizar este tipo de obra es aprovechar la instalación tanto de acometida,así como de desagüe aunque puedan ser modificadas para instalar el nuevo plato.
Hay veces que al levantar la bañera, nos encontramos multitud de instalaciones: calefacción, acometidas y desagües del mismo baño, de otro adjunto o de cocina y no siempre es posible modificar
los mismos, ya que los desagües es necesario que cuenten con la pendiente suficiente para desaguar correctamente.
El grosor de los platos de última generación suele rondar entre los 2-3 centímetros, por lo que no supone problema alguno empotrarlos en el suelo, también esta la opción de platos de ducha de obra como ya comentamos en otra ocasión, pero hay que tener en cuenta el tamaño de la válvula de desagüe del plato,así como la cota de unión entre bajante general y desagüe para que este desaloje el agua de forma correcta.
Por eso hay muchas veces que la única manera de poner el plato a misma cota que el resto de baño es levantar toda la plaqueta para poder modificar la cota de desagüe hasta la bajante.
Aquí os ponemos un ejemplo de lo que encontramos al levantar una bañera, con desagües de lavadora y fregadero y lavabo e inodoro de baño colindante, aunque se procedió a modificar la instalación para colocar el plato lo más bajo posible hubo que levantar ligeramente el mismo unos 6 centímetros para poder salvar la altura de todos los desagües.
Aun así el resultado fue muy satisfactorio.
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